Pachamama

Pachamama



Soy Gotita ¿me recuerdan? Yo soy  la que baja desde las nubes hasta el río, pero hoy no vengo a contar esa historia, sino la de la anciana Pachamama. Solía ser maravillosa llena de hermosas flores de brillantes colores, donde el trinar de las aves y el rugir de los mares indican el vigor que  Pachamama tiene, cada ser creado rinde tributo a la naturaleza, pero lo más maravilloso de esta creación ha sido el ser humano, dotado de inteligencia superior para ser el mayordomo del hogar de Pachamama.
Todos  vivían en armonía hasta el día en que el hombre decidió hacer modificaciones al lugar que le dio cobijo, así que sin remordimiento podaba árboles, construía ciudades, carros, casas, e industrias. ¡Muy bien! “Esto será de beneficio para muchas generaciones” decía el hombre, y claro, estaba en lo cierto, pero el problema era que abusaba de su poder talando demás, construyendo selvas de concreto a tal punto que varios paisajes hermosos fueron arruinados, los ríos se mezclaban con podredumbre y las costas desoladas, ocupadas por desperdicios.
El ruido ya era la expresión de esa nueva selva, Pachamama  gemía de dolor, se estremecía tan fuerte que podía sentirse debajo de mis pies, su cálido clima fue envestido por una inclemente temperatura que causa muerte y destrucción.
Me acerqué hasta donde estaba agonizante y Pachamama me dio; “Gotita no se cuánto tiempo me quede para dar vida a quien vida quita, pero tú que siempre me has acompañado, ve y dile al hombre que su odio, avaricia y poder aceleran mi muerte. Gotita enmudeció y viendo a Pachamama comprobó que la tragedia era inminente, solo quedan testigos mudos del ecocidio del hombre en contra de Pachamama.
Piensa que cada tic tac del reloj es una cuenta regresiva de este planeta que se acaba, qué haces por detener su muerte o eres el que dosifica el sufrimiento del planeta azul y por consiguiente no solo cavas la muerte de Pachamama sino la tuya también.

No hay comentarios:

Publicar un comentario